Salto de obstáculos elemental

El salto de obstáculos es la una de las modalidades de la hípica más emocionantes. En los saltos de obstáculos hay distintas categorias, en función de tu edad y de tu nivel. Igualmente hay muchos tipos de saltos con los que nos encontraremos, distinguiendo entre tres tipos de categorias:
- Verticales: Son saltos aislados, que requieren una velocidad no muy alta para que el caballo pueda llegar sin tocarlo. Para el caballo, estos saltos son los más difíciles, ya que
el caballo necesita acercarse lo máximo posible al salto para pasarlo de forma
suave y redondeado. Dentro de los saltos verticales podemos encontrarnos con:

- Tablones
- Muros
- Cancelas
- Barras aisladas puestas de muchas formas.

- Fondos: Estos saltos están compuestos en dos o tres partes. Consisten en una barra delante y otra detrás, dejando un espacio entre ellas. Cuanto más ancho sea el espacio entre las barras, más se tendrá que estirar el caballo. Este salto es complicado y requiere mucho esfuerzo del caballo, ya que es un salto en vertical, dependiendo de la altura de las barras y un salto en horizontal, dependiendo de la distancia. entre la primera y la segunda barra.

- Combinaciones:
Son varios saltos juntos.
Dobles: en donde hay uno o dos trancos entre dos saltos verticales o fondos.
Triples: son tres saltos, verticales o fondos, con uno o dos trancos entre ellos.
Caer y partir: son combinaciones en los que no hay tranco de por medio, requieren un allegada controlada, equilibrada y perfecta, en la que el caballo aprende a sentarse sobre los pies y equilibrarse solo.

La postura:
El equilibrio es la base del salto. La práctica, la constancia y la habilidad, por supuesto también influyen.
1- La parte inferior de la pierna es la parte más importante, no hay que moverla durante el salto, debe estar fuerte soportando el resto del cuerpo.
2- El jinete debe mantener su peso sobre el centro de gravedad del caballo. No adelantarse, no retrasarse al movimiento.
3- Los talones no se deben subir, para eso, hay que subir los estribos uno o dos puntos, ya que si son demasiado largos, las piernas se irán para atrás y será imposible doblarse hacia alante con el caballo.
4- Nuestro cuerpo debe doblarse desde la cadera, como en la foto, con la espalda derecha.
5- Los hombros relajados, las manos estiradas hacia delante, hacia el cuello del caballo.
Hay que tener en cuenta que durante el salto, caballo y jinete deben convertirse en uno sólo, es decir, el jinete debe ser el complemento del caballo, acompañandole, notando sus trancos, su batida.



Defectos comunes: Es normal que cuando empiezas a saltar, y a medida que vas entrenando cojas vicios y defectos,esdecir, malas costumbres. Cuanto antes se sepan, antes se corregirán. La constancia del jinete serán claves para evitar malas costumbres.

- Colgarse: Es el tirón de boca al caballo. Suele ocurrir porque el jinete no ha mantenido el equilibrio durante el salto. El caballo ha batido y el jinete se ha quedado atrás, agarrado a las riendas, por seguridad, y tirando de la boca del caballo. Para evitar esto, entrene con saltos bajos, hasta que note la batida del caballo y sepa doblar su cadera al compás del salto.

- Manos: Las manos deben ir suaves, delante del salto jugando con ellas para que el caballo note que vamos encima, que mandamos, pero dejándole libertad para estirar el cuello durante el salto.

- Apoyo: Soltar el apoyo delante de un salto es uno de los defectos más comunes que se dan. Cuando el caballo ya está encarado al salto, el jinete pierde el contacto en el último tranco del caballo, es lo contrario que las manos fijas. Esto hace que el caballo pierda confianza, que crea que el jinete ha decidido que no quiere saltar y así lo único que conseguirá será que el caballo se le salga del salto o que salte por instinto y que en el próximo salto sea el quien decida si salta o no. El contacto debe ser constante durante el salto.

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